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Mientras mi familia se ocupaba del ganado de casa, yo viajaba con el

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años llegar a ser mayoral, pues hay toda una jerarquía dentro del

grupo de pastores. ¡Estoy muy orgulloso de haberlo conseguido!

La trashumancia implicaba

realizar grandes desplaza-

mientos a lo largo del año,

siempre en busca de los mejo-

res pastos para el ganado. Hasta

hace unas cuantas décadas existieron algunas

rutas muy utilizadas por el ganado trashuman-

te: averigua por dónde discurrían estas rutas y

represéntalas en este mapa. ¿Se te ocurre por

qué esto era así? ¿Sabes cómo se llamaban los

caminos por los que se desplazaba el ganado

trashumante?

Los rebaños trashumantes estaban compuestos por muchísimas reses, normalmente

por varios miles. Controlar tantas ovejas era una tarea muy complicada, por lo que los

rebaños iban siempre acompañados por varias personas que se encargaban de que no

corriesen peligro alguno.

Pero todos estos pastores estaban organizados de acuerdo con una jerarquía muy bien

definida: a la cabeza estaba el

mayoral

, que era el responsable del ganado y del resto de

los pastores y que rendía cuentas al dueño de las ovejas. Otras personas, como los

raba-

danes

, los

ayudadores

, el

mansero

o el

sobrao

, tenían distintas funciones y contri-

buían a que el ganado no sufriese contratiempos. Los

zagales

eran chavales contratados

para ayudar en lo que fuera necesario, a la par que aprendían el oficio. ¡Hasta el mayoral

más experimentado empezó siendo zagal!.

Por su parte, los

mastines

y los

careas

eran una parte fundamental del rebaño: los pri-

meros vigilaban el ganado y los segundos ayudaban a manejar los rebaños y evitaban que

las ovejas se separasen del grupo.

La trashumancia

9`âcÀW]câXYâdUghcfâhfUg\iaUbhYâYfUâXYâ`cgâhfUVU^cgâazgâ

reconocidos, respetados… ¡y prósperos!. El Honrado Concejo

de la Mesta, creado por el rey Alfonso

X el Sabio, defendía nuestros intere-

ses y fue muy poderoso. Consiguió,

entre otras cosas, que tuviésemos

derechos de paso y pastoreo sobre

aiW\Ugâh]YffUg âibâgiY`XcâÀ^câmâ

derecho a una parte de las crías del

rebaño ¿No está nada mal, verdad?

Las costumbres de los

pastores trashumantes han

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